Salón Roots

El deseo de Sara de emprender se hizo realidad poco después de regresar a Nuevo México. Como estilista con 11 años de experiencia, la mayor parte de su experiencia proviene de su trabajo en dos salones de belleza de alta gama en la ciudad de Nueva York. Sara trabajó durante 6 años en Ouidad, un salón de lujo en Manhattan especializado en cabello rizado. Después, se trasladó a Fleischman A Men's Salon en el bajo Manhattan y dedicó 3 años a perfeccionar sus habilidades, atendiendo las necesidades de estilismo de alta gama de su clientela de Wall Street. Al regresar a su estado natal en 2014, Sara decidió que era hora de emprender su propio negocio.

Sara ha creado con éxito un salón con estilo neoyorquino y logra adaptar el estilo de vida de cada cliente a su peinado. Cada cita es importante para Sara e incluye una consulta exhaustiva para comprender plenamente las necesidades de su cliente. Cree que un buen peinado se construye sobre la base de la comunicación. Sara es considerada una triple amenaza en la industria: es experta en cabello rizado y cortes a tijera para hombres, además de una maestra en la técnica del color.

WESST ha sido fundamental para ayudar a Sara desde el principio. Sara se reunió con la consultora de Albuquerque, Amy Lahti, para obtener su opinión sobre la apertura de un nuevo salón. Posteriormente, completó una solicitud de préstamo a través de su sitio web. Tras una breve conversación con la agente de préstamos Antoinette Creel, Sara completó los formularios de préstamo, incluyendo su plan de negocios, que describe su visión para iniciar su negocio. Sara sigue aprovechando los recursos disponibles en WESST. Ha solicitado ayuda con marketing, QuickBooks y otras áreas de su negocio. Según Sara, WESST le brindó el apoyo que necesitaba en las primeras etapas de la apertura de su primer negocio y la ha acompañado en cada paso del camino.

Además de la pasión de tener su propio salón, Sara siente la misma pasión por su trabajo y disfruta de la experiencia única que crea y comparte con cada cliente al peinarlo. Ser emprendedora le permite involucrarse más plenamente con su comunidad. Sara disfruta muchísimo viendo la confianza que se establece entre ella y sus clientes.