Paletería La Reyna Michoacana

Silvia Terrazas escuchó hablar de WESST por primera vez en 1999. Se preparaba para abrir su primer negocio, una tienda de alquiler de videos en español. En el año 2000, Silvia recibió un préstamo de $1,500 de WESST para su gran inauguración. Veinticinco años después, Silvia ha seguido trabajando con WESST y ahora se prepara para la segunda gran inauguración de su food truck.

Tras recibir su préstamo inicial, Silvia continuó asistiendo a los talleres de WESST, donde aprendió a redactar un plan de negocios, comprender los costos de los productos y calcular las ganancias. "WESST me ayudó a iniciar y expandir mi negocio, desde la renta de videos y la venta de dulces y piñatas hasta convertir La Reina Michoacana en un negocio millonario", dice Silvia.

Hubo obstáculos en su camino hacia el crecimiento, desde las barreras del idioma hasta la comprensión de las leyes comerciales estadounidenses. "WESST me ayudó a completar solicitudes, acceder a talleres y conectar con otros emprendedores". Sylvia se refiere a WESST como "una mano amiga" que le brindó apoyo y conocimiento para el crecimiento de sus negocios.

Gracias a WESST, aprendí a presentar mis ideas, a hablar con más confianza en público e incluso a inspirar a otros con mi historia. Y a saber que los sueños son posibles.